Un amigo me llama hace un par de días. Es un muchacho joven, estudiante, irreverente y adorable. Lleva ya muchos días en una rutina que hasta hace poco le era desconocida. Se levanta y se va a la barricada. La barricada les costó, es un pedacito insignificante, me dice, no es una avenida principal, es apenas una calle, una calle importante, pero una calle al fin de cuentas. El aporta su conocimiento en primeros auxilios, es paramédico.
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