Cuentos

La Iguana es inocente

Yo me declaro fanática y admiradora de los poemas de Octavio Montiel, ese hombre me fascina, y como él de vez en cuando decide hacerme algún regalito, pues he decidido compartirlo.  Este es el último, y a mi sencillamente me encanta.

La Iguana es inocente

El Jaua en primera plana
anuncia al Guri repleto,
mientras acecha en secreto
a la patria soberana
esa pitiyanqui iguana,
apátrida y come cable;
animal que hasta es probable
sea hermana del mismo Niño,
pues se le nota  cariño
hacia el chamito culpable.

Claro que la  responsable
es toda la oposición
por la comunicación
tan evidente y palpable
con la iguana detestable
que se traga la energía.
Y apoyada por la CIA
nos infiltró a este animal
para causarnos un mal
que huele a pornografía.

Pero ya la policía,
con Tarek a la cabeza,
meterá a la iguana presa
en una comisaría.
Pues aquí esa tontería
de sabotaje mediático
quedará como un errático
comportamiento golpista.
Se los dice un comunista
ineficiente y  lunático.

Con el mismo tono enfático
de todo ignorante audaz,
el cola del mandamás
dejó al auditorio estático.
Y uno siempre tan fanático
al dibujo en el pasquín,
a esa iguana de postín
no quiere verla entre rejas
por las comiquitas viejas
del mediocre Tribilín.
 

Octavio Montiel

Todos los derechos de autor pertenecen a: Octavio Montiel.